La Pobla de Vallbona: el misterio de la valla desaparecida en un lateral del ecoparque que alienta el paso de furtivos a la búsqueda de productos
TICO
DE VICENTE.- La Pobla de Vallbona. Se trata de un misterio que se
arrastra ya desde hace varios años sin que la administración púbica haya actuado
ni ofrecido ningún tipo de alternativa oficial. Cualquier visitante que acude a
aportar los diversos productos y desechos que se pueden depositar en su interior
lo puede comprobar in situ sin que el panorama o la vista se modifique con el
paso del tiempo. Tal y como ha podido comprobar Infopoblano, uno de los laterales ofrece en uno de sus extremos una
visión sorprendente por cuanto la valla ha desaparecido por completo. Cualquier
persona, transeúnte o ciudadano puede acceder a través de ese lateral que
carece de valla a su interior sin que exista ningún tipo de seguridad al respecto.
Para los usuarios del ecoparque de la Pobla de Vallbona, la situación se ha vuelto
tan habitual que ya ni se inmutan si observan, en cualquier momento, a alguien
traspasar la barrera “invisible” existente entre la parte más montañosa de los
alrededores y las instalaciones públicas que constituyen este ecoparque. Al
contrario de lo que podría pensarse, observar que una persona accede de una a
otra parte se observa desde la distancia sin inmutarse ya, tal y como ha podido
observar este mismo periódico. Ubicado en la zona del centro comercial entre
los términos municipales de la Pobla de Vallbona y el vecino municipio de l’Eliana,
este ecoparque da servicio diariamente, de lunes a sábado, a múltiples vecinos
particulares de estos municipios y, también, recogen los escombros y desechos
que las empresas, dedicadas especialmente a la construcción y sectores similares,
de forma que se evitar cualquier tipo de agresión o impacto sobre el medio
ambiente, una de las cuestiones sobre las que los ayuntamientos y las administraciones
públicas luchan con mayor esfuerzo. Precisamente, los vertidos ilegales son uno
de los problemas que se deben afrontar, en muchas ocasiones, para que el medio
natural no sufra ningún tipo de acción contraria que pueda enturbiar su hábitat
habitual.
Gestionado por el Consorcio Valencia
Interior (CVI), está participado por la Generalitat Valenciana y la Diputació
de València y en el que se integran los concejales y los alcaldes de los
diversos municipios que lo conforman. Tal y como informa el propio Consorcio,
se trata de una entidad encargada de la gestión de los residuos domésticos de
61 municipios, casi la mitad de toda la provincia de València. De esta forma,
lleva alrededor de tres lustros gestionando los residuos de cinco comarcas del
interior de València, es decir, el Camp de Túria, la Serranía, la Plana de
Utiel-Requena, Rincón de Ademuz y la Foia de Buñol-Chiva, según las mismas
fuentes.
En la actualidad, el presidente es Francisco
Gómez, alcalde de Domeño; y, además, cabe añadir otras cuatro vicepresidencias
y, por último, once miembros en calidad de vocales de la junta de gobierno. Este
consorcio dispone de dos plantas de valorización de residuos municipales para
el tratamiento de los residuos generados por los 61 municipios. Uno de las plantas
está radicada en Llíria, capital comarcal, mientras que la otra se sitúa en
Caudete de las Fuentes.
Comentarios
Publicar un comentario