La Pobla de Vallbona: el centro de salud se desborda con citas para el médico de cabecera que superan las tres semanas en plenas fiestas navideñas

 

 

            TICO DE VICENTE.- La Pobla de Vallbona. Suele ser habitual, la tendencia depende, especialmente, de la época del año de la que se trate y, además, suele repuntar en las épocas estivales. Precisamente, en estos periodos del año es cuando la escasez de médicos y personal sanitario se puede notar con mayor frecuencia hasta el punto de inmiscuirse en el funcionamiento normal de un edificio tan importante como el actual centro de salud de la Pobla de Vallbona. En pleno debate sobre la necesidad de un segundo centro de salud, cuyas gestiones fueron desveladas por el actual ejecutivo local, la masificación que se presenta esta infraestructura es, cada vez, más patente. Inaugurado en el año 1998, el ambulatorio de la localidad, ubicado en la avenida de Cervantes, se ha quedado obsoleta en términos de tamaño para atender a los más de 27.000 habitantes censados que se pueden triplicar en época estival, puentes y periodos vacacionales. Cabe recordar que cuando fue abierto al público, la Pobla de Vallbona tenía alrededor de 11.000 habitantes censados oficialmente, una cifra que, en estos momentos, se ha duplicado ampliamente sin que determinados servicios públicos hayan variados paralelamente. El caso del centro de salud es paradigmático sobre el crecimiento que han experimentado los municipios del área metropolitana de València y de las comarcas cercanas. La falta de personal necesario para cubrir, correctamente, las necesidades es una de las asignaturas pendientes en los centros de salud. En el caso de la Pobla de Vallbona el actual ambulatorio se quedó falto de espacio varios lustros después de su entrada en funcionamiento. De hecho, fue en el año 2018 cuando se procedió a ampliar el actual edificio tras varios años de promesas, esperas injustificadas y problemas burocráticos. Por ello, la inversión de 497.000 euros se renovó el equipamiento clínico y el mobiliario, además de nueve consultas y la construcción de un primer piso sobre la planta baja primigenia.

            Sin embargo, las sucesivas ampliaciones y mejoras no han terminado con todos los problemas sanitarios que se arrastran en la Pobla de Vallbona. Las listas de espera son incesantes en determinados periodos de tiempo en la localidad. De hecho, a principios de enero de este mismo año, tras la época navideña, las listas de espera para una cita con el médico de cabecera desataban las críticas de los usuarios, con demoras de hasta casi tres semanas para recibir la atención del médico de familia. Este mismo verano, a mediados de agosto pasado, las mismas listas de espera superaban, también, las dos semanas, algo que se acumulaba, además, para realizarse un análisis de sangre, en abril. Y, actualmente, una cita con el médico de cabecera se retrasa hasta los días posteriores a las fiestas de Navidad.

            La Comunitat Valenciana se mantiene entre las que cosecha datos más negativos en cuanto a la atención primaria, junto a otras comunidades como las de Madrid y Baleares, donde el 85% de los centros sanitarios registran, incluso, listas de espera superiores a los dos días, un límite que se recomienda como máximo entre las autoridades científicas.