Inspecciones de la Guardia Civil en estancos y establecimientos de la Pobla de Vallbona para controlar la gestión y la venta de tabaco

 

TICO DE VICENTE.- La Pobla de Vallbona. Agentes de la Patrulla Fiscal y de Fronteras de la Guardia Civil han iniciado en la Pobla de Vallbona, en los últimos días, las labores de control de la venta de tabaco en los estancos y establecimientos de la localidad autorizados para ello, según la información a la que ha tenido acceso Infopoblano de fuentes solventes. Se trata de una tarea habitual en esta unidad adscrita de la Guardia Civil con el objetivo principal de efectuar el control y la vigilancia sobre el tabaco que se dispensa tanto en los estancos ubicados en la localidad como en los establecimientos. La legislación actual vigente prevé la venta de tabaco en aquellos comercios autorizados para ello y, por tanto, deben cumplir todas las preceptos y normativas previstas en el ordenamiento jurídico. De acuerdo a las mismas fuentes, la venta y comercialización del tabaco se puede realizar en los estancos y, además, en aquellos establecimientos como bares y tiendas que dispongan de una autorización del Comisionado para el Mercado de Tabacos, dependiente del Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas.  La ley vigente establece que las expendedurías de tabaco son una concesión administrativa del Estado que permite a sus titulares vender este tipo de productos a lo largo de un plazo de concesión concreto, según las mismas fuentes. De esta forma, se pretende un control sobre la venta del tabaco en la lucha contra el comercio ilícito de los productos, facilitar el control tributario y aduanero y, además, evitar la aparición de oligopolios en la venta minorista. Entre las labores se dedican, también, la supervisión de la calidad de los productos, controlar la publicidad y promoción de productos de tabaco, la adecuada conservación de los mismos y la prestación del servicio público, destacan estas fuentes.

            Las expendedurías de tabaco se conceden a través de una subasta pública en la que pueden participar aquellas personas físicas que acrediten los requisitos establecidos en la convocatoria que se pone al alcance del público por parte de la Subsecretaría del Ministerio de Hacienda, según las mismas fuentes. No en vano, el año pasado fue cuando se puso en marcha una nueva convocatoria para la adjudicación de nuevas concesiones, es decir, nuevas expendedurías, los tradicionales estancos. Se adjudica al mejor precio ofertado y está referida a zonas definidas en la subasta pública con criterios comerciales, de servicio público, de distancias entre expendedurías y de población. Cabe recordar que las nuevas concesiones tienen una duración de 25 años y, tras este periodo, se convoca una subasta para una nueva provisión.

            En el caso de los controles en establecimientos, los agentes de la Patrulla Fiscal se encargan que de este tipo de locales –bares, restaurantes y otras tiendas autorizadas- cumplan los requisitos establecidos en la normativa vigente como el caso de vender el tabaco a través de una máquina expendedoras, adscritas a una de las expendedurías de la localidad y disponer de las correspondientes facturas, tal y como ha podido saber este periódico.