La Finca de la Cens de la Pobla de Vallbona: se cumplen dos años del anuncio de su derribo “inminente” entre la incertidumbre, el deterioro y el abandono del inmueble
TICO DE
VICENTE.- Finales de junio de 2021, hace, exactamente, ahora dos
años. El equipo de gobierno de la Pobla de Vallbona, formado por Compromís,
PSPV, Contigo y Cupo anuncia el derribo “inminente” de la emblemática e
histórica finca de la Cens, un mastodóntico inmueble situada en pleno corazón
del casco urbano, en la avenida de Colón, enfrente de la casa consistorial. El
edil de Urbanismo, Juan Aguilar, de Cupo, anuncia que, a lo largo de ese
verano, en pleno proceso de desescalada del covid, se va a derribar el
inmueble. Atrás queda un proceloso procedimiento administrativo enfocado al
derribo de la Cens que desembocará, posteriormente, en la obtención de un
importante espacio público que permitirá conectar la arteria central con el
núcleo del parque municipal. El vetusto edificio alberga 49 viviendas en un
estado catastrófico de conservación que, incluso, ha supuesto la caída de
cascotes y partes de su estructura a la vía pública que, en su momento, provocó
desperfectos sobre una vivienda contigua. Por suerte, no hubo que lamentar desgracias
personales. Únicamente, daños materiales. Los habitantes asisten expectantes
ante un proyecto de enorme trascendencia y magnitud. Su plasmación supondrá, de
hecho, poner en marcha un proyecto ambicioso sobre un inmueble que arrastra a
sus espaldas un saco enorme y pesado de estigmas y recuerdos que dibujan una
parte notable de la historia de la Pobla de Vallbona.
El entonces equipo de gobierno, surgido de los comicios
de 2019, anuncia a bombo y platillo que, entre julio, agosto y septiembre de
2021 se procederá al derribo del edificio, a la limpieza del solar y a dar los
primeros pasos para recuperar el suelo para la propiedad municipal.
Precisamente, se aprovechan los meses veraniegos para causar el menor trastorno
y molestias a los vecinos ya que en esa época no hay clases, por tanto, los
colegios adyacentes no arrastran a sus instalaciones a los escolares y, además,
muchos vecinos han marchado de vacaciones. Sin embargo, pasan los días, las
semanas y los meses y algo no marcha bien. Lo que parecía un procedimiento
rutinario pronto se convierte en la diana política, entre gobierno y oposición.
Paradójicamente, el PP de la oposición se muestra muy crítico con un proceso de
derribo que encabeza el concejal de Urbanismo, Juan Aguilar, de Cupo, hoy, a la
sazón compañeros del gobierno engendrado a partir de las elecciones de 2023.
Desde entonces, la Cens ha sido una de las cuestiones
recurrentes que ha planteado pleno sí y pleno también el grupo popular, hoy parte
principal del equipo de gobierno. En el trasfondo de todo el proyecto la
declaración de nulidad dictada por un juzgado sobre el expediente de demolición
por la ausencia de determinados informes y, por tanto, la nulidad del
expediente de expropiación de las viviendas. Para acabar de rematar la “faena”
hay que añadir los recursos iniciados por determinados fondos “buitres”
propietarios de algunas viviendas que retrasan aún más la demolición. Un juez
tiene la última palabra para iniciar el derribo. Mientras tanto, continúa el
deterioro de la Cens.
Comentarios
Publicar un comentario