La Pobla de Vallbona prevé multas de hasta 750 euros por la entrada de perros en el cementerio municipal para evitar molestias y ruidos

TICO DE VICENTE.- La Pobla de Vallbona. El Ayuntamiento de la Pobla de Vallbona ha aprobado la nueva ordenanza de regulación del actual cementerio municipal con el objetivo de establecer las pautas de funcionamiento de este edificio de titularidad pública y de dotarlo del correspondiente revestimiento legal. El nuevo texto legal salió adelante con los votos del actual equipo de gobierno local de la Pobla de Vallbona mientras que los grupos de la oposición al completo optaron por la abstención. Finalmente, esta ordenanza salió adelante y será ahora en la fase de posibles alegaciones y recursos cuando los interesados pueden interponer las pertinentes quejas o propuestas en forma de recurso antes de que termine el citado plazo y entre ya en vigor en la localidad.

El debate sobre esta ordenanza del cementerio municipal fue enconado y por momento alcanzó escenas agrias entre el ejecutivo local de la Pobla de Vallbona y la oposición a raíz del precepto contenido en el citado texto legal en el que se prevé sancionar con hasta 750 euros a aquellos dueños o propietarios de perros que lleven a sus perros o animales de compañía a estos edificios públicos. Pese a que actualmente un cartel ubicado en la puerta de entrada ya lo recoge, será ahora con la redacción de la ordenanza cuando quedarán regulados una serie de situaciones y escenas que se pueden llevar a cabo o producir en el citado cementerio y que, de esta forma, estará reglamentadas para que no se puedan producir posibles problemas, tanto entre los propios usuarios o entre estos y el mismo ayuntamiento, al fin y al cabo, el garante del correcto funcionamiento cuotidiano.

Se trata de un debate que ha llegado a cotas de tensión y enfrentamiento entre el gobierno local y la oposición en torno a un tema que genera muchas controversias y problemas de relación entre ambas partes. De esta forma, entre unos y otros se generó una agria discusión sobre este tema, con la presencia de los animales, principalmente los perros, en los cementerios. Por parte del gobierno local se considera que los canes pueden suponer un estorbo para el resto de visitantes en el mismo, especialmente en aquellas situaciones de calma, sosiego y tranquilidad necesario en una escena del entierro de un familiar o ser querido. Las mismas fuentes añaden que los animales pueden desencadenar una serie de ruidos o molestias al resto de visitantes.

Por el contrario, la oposición replica que muchas de las mascotas o perros de compañía no suponen ningún contratiempo en un cementerio siempre que vayan en compañía de sus dueños y, por ello, avalan su presencia, con las correspondientes correas para evitar que puedan campar a sus anchas por el recinto y, de esta forma, generar molestias al resto de visitantes o personas existentes en un determinado periodo de tiempo.

En la actualidad, la Pobla de Vallbona carece de la citada ordenanza de funcionamiento del cementerio municipal. Sin embargo, está dotada de la tasa del servicio del mismo, sobre la prestación de la asignación de los espacios para enterramientos, ocupación de los mismos, reducción, incineración, movimiento de lápidas, colocación, verjas, adornos, o conservación de los espacios destinados al descanso de los difuntos.