La Pobla de Vallbona planea implantar el uso de drones para vigilar los campos citrícolas del término municipal y evitar así los robos de las cosechas
TICO DE VICENTE.- La Pobla de Vallbona. Las nuevas
tecnologías aplicadas, paso a paso, en uno de los sectores económicos más
importantes de la Pobla de Vallbona pero, al mismo tiempo, más antiguas de la
localidad. Por ello, el Ayuntamiento de la Pobla de Vallbona medita muy
seriamente el uso de drones en los campos citrícolas del término municipal, tal
y como ha podido saber Infopoblano
en fuentes oficiales. El objetivo es, principalmente, utilizarlos en las
labores de vigilancia y, de esta forma, evitar los robos que cada año se
producen en muchas localidades de la comarca de Camp de Túria, si bien se puede
extrapolar a una gran mayoría de los municipios de la Comunitat Valenciana.
Pese al descenso en la superficie destinada al cultivo y producción de los
productos agrícolas experimentado a lo largo de los últimos años, el sector
agrícola continúa siendo uno de los motores económicos de la localidad, con
numerosos e históricos dedicados a la manipulación y distribución de productos agrícolas,
especialmente, aquellos destinados a la cebolla y a la naranja, según la
información en poder de este periódico. Con la puesta en marcha de esta
iniciativa, que entre el gobierno local se da ya por hecho, se espera
amortiguar una de las preocupaciones más importantes por parte de los
agricultores de la localidad, según las mismas fuentes que han dado a conocer
esta iniciativa municipal. Sin embargo, la iniciativa no será, ni mucho menos,
un hecho aislado en el global de la comarca, ya que en algunas localidades ya
se han puesto en marcha este tipo de iniciativas.
El uso de drones para vigilancia de los campos agrícolas
será un avance notable para que los agentes de la policía puedan hacer frente a
una de las avalanchas de robos más importantes de los últimos años,
especialmente, en la Pobla de Vallbona. Algunos agricultores consultados por
este periódico colocan en el primer lugar de sus preocupaciones diarias el robo
de sus cosechas, a pesar de las denuncias de los mismos ante la autoridad
correspondiente. Por ello, se han redoblado los recursos humanos destinados a
las labores de vigilancia ante posibles robos en los campos citrícolas. Con un
total de 33 kilómetros cuadrados del término municipal de al Pobla de Vallbona,
cabe destacar que la extensión es lo suficientemente elevada que hace inviable
un control exhaustivo por parte de los agentes de la policía local.
Con el uso de los drones, la Pobla de Valbona será una de
las localidades más avanzadas en materia de vigilancia de las superficies agrícolas.
Pese a la evolución experimentada a lo largo de los últimos lustros, las
superficies agrícolas destinadas a la naranja alcanzan las 570 hectáreas según
los datos del año 2021, publicados por la conselleria de Agricultura. Justamente,
a bastante distancia se halla la superficie sobre las mandarinas se sitúa en segundo
lugar, con 232 hectáreas, sin olvidar la existencia de otras especies como las
17 hectáreas sobre los caquis o las 6 hectáreas de olivar o las 42 hectáreas sobre
el algarrobo, tal y como consta en la estadística de la Generalitat.
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